Nino Franco

Las Bodegas Franco nacieron en Valdobbiadene en 1919 gracias a Antonio, que tuvo como objetivo desde un principio crear un producto de calidad. Con su hijo Nino, que continúa la tradición de su padre, la empresa crece, se consolida y se expande. Pero es Primo, primero con su padre Nino y luego solo, quien le da a la bodega un diseño moderno. Desde el momento en que se une a la empresa, después de graduarse en la escuela de enología de Conegliano Veneto, Primo centra su trabajo en un modelo preciso de calidad aprendido durante sus muchas experiencias de viaje al extranjero y estudio. A principios de los 90, apoyado por la creencia de que un buen vino se obtiene controlando la producción desde el principio, Primo se hizo cargo de un viñedo donde experimentó con nuevas técnicas de plantación y el uso de clones viejos. Mientras tanto continúa su estrecha colaboración con algunos viticultores de la zona para desarrollar su idea de potenciar esta variedad de uva autóctona, la glera. Primo cuenta con el apoyo de su esposa Annalisa, que ahora se ocupa casi exclusivamente de Villa Barberina, y de su hija Silvia, que apoya todas las decisiones productivas, estratégicas y comerciales. ¡Toda la producción se concentra en el espumoso de la uva Glera y ese espléndido resultado que es el Prosecco!