Marco Porello

La empresa Porello es el ejemplo de la finca clásica de Roero: históricamente las tierras en propiedad se dedicaban principalmente al cultivo de frutas y la gestión estaba estrictamente en manos de la familia. La aventura del vino comenzó en la década de 1930 con Cesare Porello, una herencia aceptada por sus hijos Riccardo y Ettore, quienes aumentaron progresivamente las hectáreas de viñedos, con la vista puesta en los lugares más históricos y adecuados. En 1994 Marco, hijo de Riccardo, asumió la dirección de la bodega, gracias a sus experiencias personales adquiridas en Burdeos y en Toscana, con la misma atención a la calidad que las tres generaciones anteriores. Las actuales 19 hectáreas de viñedo se extienden en las zonas de Canale y Vezza d'Alba, donde las variedades típicas de la zona son las protagonistas: Nebbiolo, Barbera, Arneis y Favorita. Las etiquetas de Marco Porello toman (en francés) los nombres de los viñedos de donde proceden las uvas, por ejemplo, el Carnestri que da vida al Arneis abanderado de la bodega, el "Mommiano" y el "Filatura" con cepas de unos 50 años, donde reina Barbera y la "Torretta" donde nace la uva Nebbiolo de plantas de 30-50 años, dando vida al representante Roero Rosso. Las fermentaciones se realizan exclusivamente en depósitos de acero, para mantener vivo el auténtico aliento del Nebbiolo y los afinamientos de los tintos se realizan en barricas de madera de diferentes capacidades. Para Marco Porello el verdadero reto es crear siempre vinos listos, agradables, bebibles, pero al mismo tiempo respetuosos y espejo del territorio en el que se producen.